A partir de este verano, las casas prefabricadas se distribuirán en los campos de refugiados de ACNUR. En sustitución de las tiendas de campaña tradicionales utilizadas en la actualidad, estos módulos temporales están destinados a atender las necesidades de habitabilidad básica de cinco ocupantes. Con un efecto térmicamente aislante y diseñados para durar más de tres años, los paneles laminados de material polimérico que componen estas viviendas están fijados a un entramado metálico de tubos, nudos y tensores. Cada refugio está embalado en una caja de unos 2,5 x 2 metros, y cuya facilidad de montaje permite su instalación en sólo cuatro horas.