03 Febrero 2015

¡Enchufa tu ventana!

Las ventanas han ido evolucionando a lo largo de la historia adaptándose a las nuevas necesidades de cada época. Las ventanas han ido incorporando, modificando y sustituyendo elementos para mejorar y optimizar la entrada de luz natural, disfrutar de las vistas hacia el exterior manteniendo la privacidad interior, evitar la entrada de sol en verano, permitir la entrada de calor en invierno, amortiguar la entrada de ruido, etc.
  • Por: Albert López. Arquitecto
  • Compartir:
¡Enchufa tu ventana!
¡Enchufa tu ventana!
La ventana es un elemento imprescindible en la composición arquitectónica del conjunto de la fachada y del edificio. Las ventanas desde la época romana (figura 1) se han ido enriqueciendo arquitectónicamente hasta llegar al año 1950 donde se han globalizado simplificando su diseño a una composición simple de hueco con persiana o bien un vidrio minimalista de altas prestaciones. Las fachadas de vidrio (muro cortina) de los edificios construidos en los últimos 40 años tienen un diseño similar aunque los usos y las orientaciones son diferentes para cada edificio.

Ahora tenemos la oportunidad de reincorporar elementos eliminados anteriormente y añadir nuevas tecnologías para adaptarnos a las nuevas necesidades requeridas con la aprobación del RD 235/2013 sobre certificación energética de edificios existentes. A parte de tener una composición arquitectónica con el entorno también a fecha de hoy se les exigirá un comportamiento energético sostenible según el uso y orientación de la fachada del edificio.

¿Cómo es posible que un elemento fundamental como la ventana en nuestra vivienda actualmente aún actúe de forma aislada e independiente?

Una ventana, dos ventanas, tres ventanas, cuatro ventanas... muchas ventanas por separado en una fachada no aseguran un comportamiento energético óptimo y sostenible. La ventana de la habitación, del comedor, del salón, cada ventana a fecha de hoy es un elemento aislado y pasivo de una casa y actualmente hacen lo que pueden a nivel energético. No interactúan con los cambios climáticos exteriores. La unión de las ventanas con tecnología conseguirá trabajar en equipo mejorando la iluminación natural, temperatura de confort y ahorro energético en nuestra vivienda o edificio

Con el nuevo RD 235/2013 la fachada será el primer control energético de nuestra vivienda ya que controla la luz natural, radiación solar, ventilación natural, ruido exterior, etc. A fecha de hoy en una vivienda tenemos una suma de equipos que cada uno hace lo suyo pero no interactúan entre ellos para buscar el bien común. Es necesario que las ventanas actúen todas a la vez y de forma conjunta como una orquesta en función de los parámetros de confort, seguridad y ahorro energético de cada una de nuestras casas. A veces el camino de conseguir una SmartCity empieza por los elementos más pequeños y con un sistema de redes poder conseguir conjuntos más grandes que nos permitan trabajar conectados. (Figura 2). Consideramos que ahora la ventana ya no podrá seguir siendo un elemento aislado y tendrá que formar parte de una “Fachada Dinámica” donde se trabaja en equipo o en red (Smart). Un primer paso que proponemos para conseguirlo es enchufar nuestras ventanas.

Las antiguas construcciones como iglús o cabañas (figura 3) eran sostenibles y sin consumo de energía debido a que sus necesidades eran diferentes de las actuales ya que su arquitectura buscaba mejorar las condiciones interiores respecto de la climatología exterior. Las viviendas una vez superadas las prioridades básicas de

supervivencia y seguridad frente a la intemperie o intrusión se han ido incorporando mejoras en el confort añadiendo nuevas fuentes de energía en las viviendas. Al principio fueron las hogueras y chimeneas, y después para mejorar el confort hemos ido incorporando la calefacción, aire acondicionado, etc. El reto en nuestros hogares en 2014 está en el equilibrio entre el confort, seguridad, ahorro energético y respeto por el medio ambiente (sostenibilidad).

¿Cómo sería la ventana perfecta?

La ventana es a fecha de hoy una de las asignaturas pendientes sobre todo en las viviendas. La ventana es un elemento muy difícil de instalar y certificar a nivel térmico, acústico y de estanqueidad. La certificación necesita dos factores: La fabricación e instalación del producto. La ventana en su proceso de fabricación es una suma de productos que cada uno está certificado por separado con el marcado CE como garantía pero veamos un ejemplo del proceso tradicional de instalación de una ventana:

  • -  Primero se coloca el premarco en la fachada. El contratista,

  • -  Segundo se coloca los marcos y perfiles. El carpintero o instalador de ventanas,

  • -  Después de coloca el vidrio. El cristalero,

  • -  Luego la persiana. El instalador de persianas,

  • -  Más tarde el motor y mando. El instalador de automatismos,

  • -  Si hay domótica. El integrador,

  • -  Y por último... a veces la colocación de toldo exterior. El fabricante de toldos.

En total 7 proveedores para una simple ventana. Demasiados industriales para que al final todas estas partes están bien instaladas y hagan su correcta función en la fachada de su casa.

A fecha de hoy la industria ya ha incorporado en sus productos unos procesos de industrialización y prefabricación incluyendo la mecanización y automatización en sus fábricas. Pero todavía seguimos fabricando las ventanas de forma artesanal.

Les propongo una idea... Imagínense que la ventana pudiera ser como un electrodoméstico y si pudiera escoger me gustaría que las características de mi ventana fueran:

  • -  Doble vidrio (35 db para el ruido y para el frío o calor U: 1,5-2,0 W/m2oK)

  • -  Oscilo-batiente (Para ventilación sin corrientes de aire)

  • -  Transmisión Lumínica (Máxima Luz natural. TL: 1 o 100%)

  • -  Perfiles con Rotura de Puente Térmico ( La U: 1,5-2,0 W/m2oK)

  • -  Persiana o toldo vertical (Protección solar máxima en verano Factor solar FS: 0%)

  • -  Motorización + mando a distancia + sensor ( Todo sin cables excepto motor a 230V)


En un futuro los técnicos y usuarios podremos comparar las ventanas con sus características propias y escoger la que mejor se adapte a nuestras necesidades y fachada. La ventana ideal debería ser igual que un electrodoméstico. La ventana se escoge, se instala en obra, se enchufa y funciona. Sólo habría que preveer el hueco arquitectónico y un enchufe 230V. El lugar para instalar la ventana será un rectángulo donde poder instalarla sin preveer agujeros para el bombo de la persiana o de la cinta, etc. asegurando así que queda perfectamente integrada en la fachada. Así la ventana sería suministrada e instalada asegurando y certificando la calidad prescrita por el técnico.

En este camino la Asociación Española de Fabricantes de Fachadas Ligeras y Ventanas (ASEFAVE) ya ha propuesto una etiqueta que informe y aporte mas datos al técnico (arquitecto, ingeniero, decorador, etc.) y al usuario. La normativa a fecha de hoy exige un marcado CE del producto y el cumplimiento del Código Técnico de la Edificación en cuanto a su instalación en obra y complementado a fecha de hoy el comportamiento energético con el RD 235/2013. Proponemos que las etiquetas sean para el conjunto o “pack energético completo” incluyendo desde el vidrio hasta el motor con sensor y mando a distancia. De esta forma podríamos dar respuesta a las necesidades del usuario de confort, seguridad y ahorro energético.

Si te gusta ¡¡ síguenos !!

© ArquiMagazine

f1arquitectura.com - Diseñado por weareplay
Rss